Del fin y del inicio de una etapa de mi vida

Todo lo que empieza, acaba; definitivamente. Y es que todo inicio tiene un fin. Hay quienes dirán que si y quiénes dirán que no, como en todo. Yo concuerdo con ambas posturas, de la siguiente manera: los principios concluyen de una u otra forma, es cierto; sin embargo quienes dicen que hay cosas que no terminan, probablemente se refieren a que ese inicio tuvo o tiene una continuación, es decir, que sigue ahi pero modificado y/o evolucionado. Por ejemplo, una relación entre dos personas que inició por una atracción puramente física y sexual, puede terminar como evento únicamente carnal y continuar como una amistad sincera (difícil, pero no imposible de ocurrir). Es así como lo que empezó -> terminó y/o cambió.

Es que la vida está llena de etapas que inician y finalizan una y otra vez sin cesar. A veces hasta de forma imperceptible lo hacen. De lo que también estoy convencida es de todo cambio tarde o temprano es benéfico; es parte de crecer. Se escucha fácil, pero no es sencillo el dejar ir y por eso a veces sólo reemplazamos. Somos seres humanos a fin de cuentas y tenemos defectos y virtudes.

Este viernes, un día de febrero del 2010, marca el TÉRMINO de un periodo que inició en marzo del 2008. Ese lapso de tiempo fue simplemente INTENSO, no hay mejor palabra para describirlo, si que lo fue. ¡Uff!. En esos 2 años viví tantas y tantas cosas; quedan millones de recuerdos y muchísimas experiencias que quedarán tatuadas en mi, permanentemente. Asimismo, este viernes, un día de febrero del 2010, marca el INICIO de una nueva etapa que en cierta forma es incierta (como todo FUTURO) y al mismo tiempo me entusiasma, me emociona y me hace estar sumamente FELIZ, el hecho de comenzar esta nueva faceta de mi vida académica/laboral. Se que el ÉXITO no vendrá solo, siempre he luchado por lo que me propongo y así continuaré para que llegue bien merecido. Este viernes, un día de febrero del 2010, CONCLUYO mi posgrado/especialidad médica y al mismo tiempo INICIO un futuro laboral y académico completamente diferente, donde la mínima decisión influirá profundamente en mi y hasta en las personas que me rodean. Así es la vida: es un ciclo y hay que evolucionar conforme pasa el tiempo.

Sinceramente, estoy FELIZ porque me han pasado cosas excelentes y buenas; también estoy nostálgica y recordando momentos tanto alegres como tristes. Pienso que todas las palabras que pueda publicar en este post, se quedarían cortas para describir el sinfin de emociones que tengo en este momento. Únicamente me queda decir: GRACIAS a la vida, a la mamá maravillosa que tengo, que es mi base y mi columna; a mi padre distante y desapegado que me hizo autosuficiente y fuerte tras los tropiezos; a mi hermana y hermano que con su inteligencia y cariño se convierten en mi motivación; a mi tía que fomentó mi interés en el aprendizaje día tras día desde muy pequeña; a mi abuelita divina a quien le dedico cada victoria porque me enseñó con su ejemplo y le debo lo que soy; a mi abuelito que es representante digno de que el cariño y la experiencia logran evoluciones; a muchísimos profesores y doctores que aparte de compartir enseñanzas me han brindado su amistad y cariño sincero; a A.S. a quien conocí en marzo del 2008, pero que fue hasta hace unos cuantos días que se convirtió en una persona importantísima en mi vida, logrando mi cariño, mis pensamientos, mi sonrisa, mi emoción, ... y ya veremos que más porque probablemente influya en mucho mi futuro; lo que no es incierto es que A.S. y yo estaremos juntos en muchos aspectos y eso hace que me sienta muy FELIZ.

Mención aparte la merecen mis amigas y amigos que son pocos, pero sinceros y valiosos; este viernes, un día de febrero del 2010, marca también que mis dos mejores amigos en estos 2 años, S y J con quienes he vivido infinidad de momentos, tengan destinos laborales/académicos diferentes al mio y eso implica que se irán a vivir lejos, lejísimos de esta ciudad y/o de este país; aunque se que es la decisión correcta y que tendrán éxito asegurado, no deja de darme tristeza porque ya no estaremos físicamente cerca, no podré verlos tan frecuentemente como antes y seguramente los extrañaré muchísimo porque los quiero en verdad. En fin, así es esto.

¡Qué rápido pasó el tiempo! y no fue en vano. Los recuerdos, están solo en la memoria y ya. Estoy muy segura de que con todo y la nostalgia, no regresaría el tiempo; no hay vuelta hacia atrás. Estoy muy CONTENTA y SATISFECHA en el camino por el cual voy. Miro hacia el frente y no hay regreso.

¡Que tengan una semana exitosa!

Imagen: Sigo caminando, de Carla Helena Vázquez Juárez

Si la vida fuera una tirada de tarot...

...me encantaría ser la Emperatriz por todo lo que representa: vida, principio, femineidad, sensualidad, sexualidad, potencial, descubrimientos, nuevas experiencias, placer, belleza, plenitud, servicio y ayuda a otros, socializar, abundancia, productividad, enriquecimiento, evolución, etc. Me gusta que es una figura activa y no aparenta ser pasiva y contemplativa. Claro, todo esto en su posición no invertida, al derecho.

La otra figura que siempre me ha llamado la atención, es el Emperador: me da la apariencia de fortaleza, estabilidad, protección, firmeza, apoyo, perseverancia, convicción, estabilidad, poder, cuidado, serenidad, equilibrio, energía, vitalidad, atracción, etc. Igualmente, siempre y cuando no se encuentre invertido.

Ambos, me parecen una pareja fuerte y especial: como polos opuestos pero complementarios. Una abundante e independiente, pero apoyada en la fuerza y estabilidad del otro. Como una especie de límite necesario y no impuesto, para lograr un equilibrio exitoso. Dos figuras poderosas y hasta intimidantes en todos los sentidos e interpretaciones.

Si la vida fuera una tirada de tarot, me encantaría ser la Emperatriz; me encantaría estar junto al Emperador. Me encantaría encontrarme a esta pareja unida, tal como muestra la imagen. La vida es más que una sola tirada de tarot, sin embargo, es muy posible encontrarse ante personas que poseen las características de estas dos figuras. Complejas, pero interesantes e intensas.

¡Que tengan buen inicio de semana!

Imagen: Cartas de taror Rider-Waite

Estaba escribiendo un post...

...pero debido a la hora actual, a que no he dormido y a que ya casi me tengo que ir a mis labores habituales (académicas y trabajo rudo), posteo un video, únicamente porque me gusta y porque en estos últimos días he tenido muy presente la letra de esta canción:

En lo personal, me gusta más la versión unplugged que la del video oficial:

¡Que tengan excelente semana!

Canción: Eres para mi, Julieta Venegas y La Mala Rodríguez / Anita Tijoux

De la serie: Believe it or not (parte 1)

Aunque ustedes no lo crean, desde pequeña me llamó la atención aprender a realizar todo tipo de actividades; desde observar diferentes elementos en el microscopio, bordar en tela, pintar (sobre todo en óleo), modelar (plastilina, barro), tejer, tocar algún instrumento, bailar,...hasta llegué a hacer muñecos de peluche y diseñar ropa. Sinceramente, nunca he sido muy hogareña que digamos, más bien siempre fui hiperactiva y el aprendizaje formal lo combino con el cotidiano, lo cual siempre me ha resultado bastante funcional.

A pesar de ser una niña tranquila (y a veces silenciosa), me la pasaba cambiando de actividad a cada momento: de armar un rompecabezas, a un juego de mesa, a leer un libro, a pintar con acuarelas, a observar animales, a andar en bicicleta, a escuchar música, a volar un papalote, a bailar...etcétera, etcétera.

Fui la primogénita; mis papás siempre trabajaron gran parte del día y como ya he mencionado, básicamente me crié en un mundo de adultos, así que aprendí a hacer actividades muy diversas:

-Con un tío adolescente que tocaba diferentes instrumentos y que además se la pasaba escuchando todo tipo de música, fue fácil crear gusto por la misma desde pequeña.

-Con un primo mayor que yo por seis años inquieto, de pensamiento rápido y analítico, rebelde, que vive al máximo y que es protector como si fuera prácticamente el hermano mayor que no tuve, fue casi indispensable aprender a convivir con "hombres", jugar "cosas de niños" y acostumbrarme a la repentina brusquedad; a él le debo el interés por la tecnología, los videojuegos y sobre todo, el aprender (aunque sea un poco), a diferenciar las palabras y acciones sinceras de un hombre, de las que no lo son (para que no caigas tan fácilmente, en sus redes, como él mismo dice)

-Con una tía diseñadora de modas y amante del arte en general (pintura, escultura y demás), fue sencillo el tener acceso a todo tipo de actividades que iban desde manualidades diversas hasta asistencia a eventos culturales, de moda y claro, al cine y al teatro; a ella le debo el ser femenina sin caer en excesos, el gusto por actividades culturales y el haber aprendido a escribir, leer, sumar y restar desde los 3 años de edad.

-Con una abuelita llena de historias que contar, con una vida de trabajo en muchas áreas, que vivió en varias partes de la República Mexicana y que conservaba la entereza sin perder sensibilidad, fue casi espontáneo el hecho de que yo pudiera crear el sentido de asistencia a los demás, el gusto por la lectura y por los viajes.

-Con un abuelito que trabajó en áreas dedicadas al control y evaluación, con una capacidad de apreciación distinta y muy visual, fue inmediato el hecho de que me enseñara a no ser conformista, a observar detalles importantes y a no pasar por alto los defectos que pudieron evitarse.

-Con unos padres médicos: mi mamá cariñosa, activa, independiente, humana, acertada, hábil y en constante superación, fue natural el que yo tomara interés por la atención a las personas tratándolas siempre con respeto y sin olvidar su individualidad; con un papá exigente, duro, pragmático, puntual, poco expresivo y hasta distante, fue necesario que yo aprendiera a ser independiente, fuerte, resistente, de adaptación rápida a los cambios y de recuperación veloz tras cualquier caída. Ambos, contribuyeron con algunos rasgos obsesivo-compulsivos que en ocasiones son notorios en mi y a que finalmente me dedicara a la Medicina, con todo lo que conlleva.

Hoy reflexionaba acerca de que los primeros años de mi vida me han marcado de forma muy importante, tal vez en ocasiones de manera muy positiva y en otras negativa, pero que definitivamente me formaron e hicieron de mi todo lo que yo soy ahora, junto con el camino que he elegido. En mi, existe algo de todas las personas mencionadas en este post; prácticamente ha sido como si me hubieran heredado en vida. A veces siento como si fuera varias personas en una, interactuando entre ellas. De repente, sobre todo en las madrugadas, pienso que posiblemente es buena idea el que herede un poco de mi en sinergia con alguien más. Siempre es mejor unir energías; estoy segura que formaríamos una mezcla interesante. Después, reconsidero y me doy cuenta de que aun no es el momento (al menos no a corto plazo). Mejor vivo el presente. Un poco de divague matutino.

¡Que pasen buen día!

Imagen: Lily in harmony de Franz Heigl