Siempre me he preocupado de más; también tengo algo (o mucho) de obsesiva-compulsiva. Sin embargo, desde hace poco más de un año debido a una noticia que me dieron (totalmente inesperada), cambié mucho mi forma de ser; dejé de preocuparme por cosas que no eran tan importantes como yo pensaba y comencé a disfrutar cada cosa que hacía. Me rio mucho más desde entonces. Pero (siempre los peros), tantos años de ser una persona que pensaba mucho antes de hacer cualquier cosa, creo que me afectaron, porque esto de "no ser tan preocupona", me ha traido como consecuencia que a veces no tome la decisión más acertada. Y no es que me arrepienta, sino que he reflexionado que me cuido de que los demás no me lastimen y a veces termino lastimada por acciones que yo misma hice. Lo anterior me ha llevado a pensar que tal vez debo protegerme de mi misma; que puede ser que mi principal "enemigo" y probablemente el único que tengo, sea YO misma. Porque YO soy la que me he limitado en ciertas cosas y YO soy la que me he permitido ciertas cosas también. Nadie más, sólo YO. Puro yo-yo, pues.
Difícil empezar por uno mismo; dura la autocrítica. Todavía más complicado observar nuestro propio interior, para saber de que debemos "protegernos" y a que le tiramos. Ya di el primer paso: reconocer la situación; aún no sé cuál será el segundo paso.